«Como ciudadano y feligrés, me solidarizo con la comunidad católica misionera, que se vio sorprendida por el cobro de un arancel por parte de Vialidad Nacional para poder realizar la tradicional peregrinación en tributo a nuestra virgen de Loreto.
Para el pueblo misionero la fe es sagrada, no tiene precio. Y como persona de fe, confío en que las autoridades pertinentes rectificarán esta decisión», expresó el gobernador.






















